Sólo
una mujer cristiana es capaz de sacarme de mi retiro de la blogosfera. Todo el
mundo sabe que yo estoy a pie, pero eso no me impide moverme a buscar trabajo
mezclando cemento para ganarme la vida honradamente (pero por debajo de la mesa
para que no me quiten la reforma). Hoy me monté en el tren tempranito en la
mañana, el vecino me dio pon y no hago nada más que entrar por las puertas del
tren y escucho la melodía de mujeres cristianas cantando al son de la guitarra
y las congas africanas. Inmediatamente se me paró el bicho y el espíritu santo
se me metió por el culo. Sentí el amor de Dios y él puso en mi corazón que la
muchacha que cantaba de la blusa blanca es la mujer con la que me debo casar.
Cuando iba a salir del tren me acerqué a ella y le dije que me había tocado
grandemente su devoción. Esperando que
me abrazara con el amor de Dios, ella sonrió tímidamente y el amor fue instantáneo.
Si alguien la conoce por favor díganle que me escriba o pásenme su Facebook. Mujer,
DTBPEC bien duro.