Moco Parte 3, pronto en mi vida

Desde que murió Moco Parte 2 he estado reflexionando sobre la posibilidad de buscar un sustituto.  Por buen tiempo estuve bien triste por la trágica muerte de Moco Parte 2, pidiendo ayuda sicológica profesional de mi vecino y mami. Ya estoy mas fuerte que nunca y no me duele pensar en mi viejo amigo, ahora es tiempo de traer a mi vida un nuevo amor en Moco Parte 3.  Mi intensión es conseguir al perro mas cabron de todo Puerto Rico, que tenga ganas de romper cosas, de cagarle el patio a la gente, de que se pase ladrando y comiendo con cojones... y que a la misma vez sea un perro inteligente y diabólico como lo fue Moco Parte 2.  Si tienes ideas de que tipo de perro debo conseguir, por favor dejame saber.

Ahora que estoy aquí me recordé de algo que Moco Parte 2 hizo que nunca voy a olvidar. Una semana antes de morir Moco Parte 2 estuvo ladrando con cojones a las 5AM. Yo me levanto a ver que era lo que estaba pasando cuando lo veo lleno de mierda en la sala.  Se estaba comiendo su propia mierda.  El asunto no es ese, es que la mierda no era de Moco Parte 2. Esa mierda venia de otro lado.  Comencé una investigación en la urbanización para descubrir de donde salía esa mierda.  Luego de dos días intensos averiguando, la mierda provenía del viejo ese que murió del susto que le di con los petardos.  Eso obviamente fue antes que el viejo se murió.  El viejo este cagaba en un plato y lo dejaba en el patio de la casa o lo echaba en las matas.  Moco Parte 2 parece que olió eso y llegaba allá de vez en cuando a comerse la mierda y me traía un poquito para ver si yo quería.  Ningun amigo ha hecho eso por mi: traerme de comer mierda ajena. Moco Parte 2 nunca supo que a mi no me gusta la mierda, algo que aprendí a las malas.